mil gracias
Gracias a la vida (Violeta Parra) podria añadir mil gracias más… por una flor por el mar y su brisa por el cosquilleo que sientes a veces por una palmera de coco por los momentos sin respiración por una canción por enamorarse por una llamada inesperada por el murmullo del silencio por el compartir por las burbujas de jabón por un abrazo por una puesta de sol por una canción por un paseo sin rumbo por todas las personas que se van cruzado en mi camino de la cuales puedo aprender por las que nunca me dejaron y creyeron en mi por las ganas de luchar por vivir… por… La vida no siempre es fácil incluso podría decir que a veces se complica o nos la complicamos demasiado pero es bonito ver la cantidad de cosas por las cuales merece la pena luchar y mucho mejor si puedes luchar acompañado. Poder mirar hacia atrás y pensar ”eso me pasó a mi?” Y esta pregunta podértela hacer porque tu lucha va teniendo su recompensa. Qué razón tenía aquel hombre cuando nos decía que la vida la puedes ver como un camino recto en el cual solo existe el hacer sin mirar alrededor o por el contrario puedes ver que en el camino te encuentras con árboles, estos árboles pueden tener sus hojas, nidos, pájaros, más adelante del camino quizás hay un lago…y poder ir disfrutando del paisaje… Si hay algo que nos ha dado la oportunidad de estar aquí, porqué no aprovecharlo? …mil gracias…
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio dos luceros que, cuando los abro,
perfecto distingo lo negro del blanco,
y en el alto cielo su fondo estrellado
y en las multitudes el hombre que yo amo.
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído que, en todo su ancho,
graba noche y día grillos y canarios;
martillos, turbinas, ladridos, chubascos,
y la voz tan tierna de mi bien amado.
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el sonido y el abecedario,
con él las palabras que pienso y declaro:
madre, amigo, hermano, y luz alumbrando
la ruta del alma del que estoy amando.
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados;
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos, montañas y llanos,
y la casa tuya, tu calle y tu patio.
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio el corazón que agita su marco
cuando miro el fruto del cerebro humano;
cuando miro el bueno tan lejos del malo,
cuando miro el fondo de tus ojos claros.
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto.
Así yo distingo dicha de quebranto,
los dos materiales que forman mi canto,
y el canto de ustedes que es el mismo canto
y el canto de todos, que es mi propio canto.
Gracias a la vida que me ha dado tanto.